Artista sudafricano Grady Zeeman las pinturas figurativas y de retratos abordan la energía emocional y la conectividad espiritual. Aunque creció rodeada de mujeres dinámicas en su familia, ella también se dejó moldear por la sociedad una vez que se casó. Su vida como diseñadora de moda en Ciudad del Cabo y la de esposa de un granjero fueron incompatibles, lo que le llevó a la depresión y la manifestación de diferentes enfermedades a lo largo de los años. Solo cuando adquirió conocimientos en el campo de la energía emocional y la conectividad espiritual, logró sanar su cuerpo y comenzó a vivir una vida plena siendo fiel a sí misma.
El arte se ha convertido en parte de su proceso de curación, ya que cada pintura es parte de su propio viaje, ya sea a través de la experiencia directa o una lección de vida que aprendió al observar su entorno. Mientras cuenta su propia historia, así como la de tantas otras mujeres, es lógico que pinte retratos femeninos, cada uno con un simbolismo adicional en este viaje de sanación. Su obra se caracteriza por la melancolía con aspectos subyacentes de espiritismo. Su medio preferido es el óleo, aunque comienza con una fina capa de acrílico. La paleta de colores está principalmente relacionada con la sanación energética, con capas y texturas que simbolizan las capas emocionales y las dificultades que enfrentamos en la vida.
El artist ha exhibido su trabajo extensamente, mostrando las principales ciudades de los Estados Unidos, el Reino Unido, Europa occidental, Asia y África.